26 de diciembre de 2011

Insomnio

Insomnio: es aquella impotencia que sentimos a poder entrar al mundo de los sueños, el cual en estos simples momentos añoro con todas mis fuerzas, no se puede vivir un minuto sin soñar algo nuevo cada día. Para esta joven escritora aficionada, lo único que mueve al mundo reside en nuestra mente y en nuestro corazón.


Se cree que no hay relación alguna entre ellas e incluso se piensa que es contradictorio, además de contraproducente que exista alguna relación entre estas dos partes que componen a uno como persona humana en este mundo. Pero creo haber encontrado la respuesta de esta relación: el corazón anhela para que la mente pueda manifestar aquellos sentimientos y emociones de manera tangible como en una obra de arte.


Pero el insomnio es el limitante que nos imponemos para evitar que nuestro corazón sueñe y nuestra mente produzca aquello que deseamos con todo nuestro ser.


El insomnio es un arma de doble filo, mientras que con él se evita volver a soñar con aquello que sabemos perfectamente que adoramos como método de defensa, evitamos descubrir lo que por dentro nos mueve a seguir en esta vida.


[Quiero aclarar una cosa: en estos momentos sufro por la culpa de aquel asesino de ilusiones.]


{Fin}

No hay comentarios:

Publicar un comentario